Seguro que al leer calabacín algunos habréis puesto una cara rara, eso es porque no habéis probado este delicioso, jugoso y contundente bizcocho.
Seguro que muchos conocéis la famosa receta de Anna Olson, yo he adaptado la receta a mi manera, entre otras cosas utilizando harina de avena en lugar de trigo ya que creo que es más ligera y digestiva, el resultado es un sano y delicioso dulce ideal para introducir verdura a los más pequeños.
Os animo a prepararlo; es fácil, rápido y con ingredientes que todos tenemos en casa.
Ingredientes:
- 3 huevos camperos a temperatura ambiente
- 350 gramos de harina integral de avena
- 2 naranjas (ralladura y zumo)
- 50 ml de zumo de naranja
- 150 ml de aceite de oliva suave
- 350 gramos de calabacín rallado
- 200 gramos de azúcar moreno integral de caña
- 60 gramos de chocolate negro rallado
- 2 cdtas. de canela molida
- 1 cdta. de sal
- 1 cdta. de levadura química (polvo de hornear)
- 1/2 cdta. de bicarbonato de sodio
- 10 ml de licor de naranja (opcional)
Cobertura:
- 20 ml de agua
- 20 ml de zumo de naranja
- 2 cucharadas soperas de mermelada de naranja amarga con trozos
Preparación:
- Lavamos los calabacines y rallamos con un rallador, hacemos lo mismo con la naranja, teniendo cuidado de no utilizar la parte blanca de la piel ya que nos daría amargor, reservamos.
- Batimos los huevos con el azúcar y la ralladura de naranja hasta obtener una mezcla espumosa, seguidamente añadimos el aceite, el zumo de naranja y el licor.
- Por otro lado mezclamos y tamizamos la harina, la canela, el bicarbonato, la levadura y la sal, agregamos el calabacín rallado hasta que quede bien impregnado.
- Incorporamos los ingredientes secos a los líquidos y mezclamos bien, por último añadimos el chocolate rallado.
- Engrasamos y enharinamos el molde que hemos elegido y vertemos la mezcla en él. Cocemos en el horno previamente precalentado, a 170 ºC durante 50 minutos aproximadamente. Como depende del tipo de horno tendrás que introducir un palillo y comprobar que este sale limpio y seco.
- Mientras tanto, preparamos nuestra cobertura poniendo un cazo al fuego con el agua y el zumo hasta que se caliente, después añadimos la mermelada de naranja amarga y removemos hasta que espese un poquito pero sin llegar a hervir.
- Dejamos enfriar el bizcocho 10 minutos antes de desmoldar y seguidamente vertemos la cobertura por encima.
Rico, fácil de preparar y saludable, ¿Qué más se le puede pedir a un dulce?