Croquetas de pollo al curry «Dos por uno»

El ritmo frenético al que nos vemos sometidos día a día no nos deja demasiado tiempo para la cocina y si además, trabajas fuera de casa y tienes niños, no encuentras espacio  para cocinar y menos para planificar, por eso hoy os traigo la receta de unas  croquetas a las que  llamo dos por uno, y es que en su elaboración obtenemos un delicioso caldo de pollo, el cual  podemos utilizar para hacer una sopa de fideos. ¡No me digáis que no es una apuesta tentadora!, dos platos  al mismo tiempo y además es una comida que suele gustar a niños y no tan niños, doy fe de ello porque lo he testado con los amigos de mi hijo. Y por si fuera poco estas croquetas  admiten perfectamente la congelación, con lo cual podeis prepararlas con antelación.

Animaros a hacerlas, están deliciosas y como todos mis platos, muy fáciles de preparar.

Ingredientes:

• 500 gramos de muslos o contramuslos de pollo campero (son más jugosos)
• 1 1/2 de agua
• 2 zanahorias
• 1 puerro solo parte blanca
• perejil picado (1/2 cucharadita)
• 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
• 450 ml. de leche aproximadamente
• 50 ml. de nata para cocinar
• 3 1/2 cucharadas de harina
• 1 cebolla pequeña
• 1 cucharadita de postre de curry (si os gusta mucho podeis aumentar la cantidad)
• sal
• 1 huevo, harina y pan rallado para rebozar
• Aceite de oliva para freír

Preparación:

1. En primer lugar vamos a poner al fuego una cazuela  con  agua,  las verduras y una cucharada de sal, cuando empiece a hervir añadimos  el pollo, dejaremos cocer 45 minutos aproximadamente, probamos el punto de sal.
2. Una vez cocido el pollo dejamos que se temple y desmenuzamos.
   

   
3. Necesitamos una sartén  antiadherente y de tamaño adecuado, ni demasiado grande, ya que entonces tendríamos que usar  más cantidad de aceite, ni demasiado pequeña, porque sería más dificultoso trabajar nuestra bechamel. Ponemos el aceite y cuando esté caliente, pero no demasiado, añadimos la cebolla en trocitos, tapamos la sartén y pochamos, no tiene que tostarse,  si vemos que  alcanza demasiada temperatura, apagamos el fuego un momento para que pierda temperatura y seguimos después.
   

   

    

4. Cuando la cebolla esté casi transparente, añadimos la harina removiendo enérgicamente  para que no nos queden grumos, cuando veamos que tiene  un ligero tono tostado es que  ya la tenemos lista y podemos ir añadiendo la leche caliente muy despacio para que la harina la vaya absorbiendo poco a poco,  por último la nata líquida y  media cucharadita  de sal.
5. Añadimos ahora el pollo desmenuzado, el curry y perejil picado, removemos bien y probamos el punto de sal, debemos cocinar nuestra bechamel hasta que se despegue fácilmente de los bordes de la sartén.
   

   

   

   

   

   
6. Ponemos la bechamel en una bandeja y dejamos enfriar, después tapamos con un film e introducimos en la nevera mínimo 4 horas.
7. Preparamos tres cuencos, uno con harina, otro con huevo y  el último con pan rallado. Vamos dando forma a nuestras croquetas como más nos guste, en forma de bolita o alargada, te puedes ayudar por una cuchara, pasamos por harina, seguidamente por huevo y por último por pan rallado.
   

   
8. Ahora toca freírlas, para ello utilizaremos una sartén honda para que queden bien cubiertas y una generosa cantidad de aceite. El aceite no tiene que echar humo pero si estar lo suficientemente caliente como para crear una costra crujiente, vamos dejando las croquetas en un plato con un papel de cocina absorbente.

Truco: Si cambias  la leche por caldo de pollo, conseguirás una velouté en lugar de una bechamel, y os puedo asegurar que están deliciosas.